Tras un Pleno-Estafa del Parlamento en el que se insinúa un gran acuerdo PP-PSOE, la presidenta de la Junta ha roto el Pacto por Andalucía y ha convocado elecciones autonómicas para el 22 de marzo próximo. En ese plenario se han blindado a los miembros del bipartidismo en la Cámara de Cuentas y se han nombrado los parlamentarios que componen la Diputación Permanente. Curiosamente, los propuestos por el PSOE son pre-imputados de los ERE que, con este nombramiento, escapan a la justicia provincial y continúan con su condición de aforados en el Supremo. Aquí se puede ver el vídeo de la intervención del portavoz de Izquierda Unida, José Antonio Castro. Ha sido un epílogo bochornoso para esta IX Legislatura que ahora se termina bruscamente.Cinco minutos sin la Fuerza de la Izquierda en el gobierno andaluz le han bastado a Susana Díaz para buscar el acuerdo con el PP. Cinco minutos para olvidarse de las 16 leyes que están en la fase final de la tramitación. Cinco minutos para desarrollar otras 14 más que se tramitaron después del Acuerdo para el gobierno.
Cinco minutos para hacer felices a los banqueros y a los poderosos echando a la Fuerza de la Izquierda del gobierno andaluz. Para volver a las andadas recuperando el frenazo que IU echó a la colaboración público-privada que triplica los costos de la infraestructura y arruina a los andaluces. Para hacer feliz a Felipe González, aquel pionero de las mentiras (OTAN, de entrada NO) del que ahora sale la señora Díaz como alumna aventajada favoreciendo la gran coalición con la derecha andaluza.
En una rueda de prensa celebrada en la tarde de ayer, Antonio Maíllo empleó estos argumentos para decirle con total claridad al pueblo andaluz que la presidenta de la Junta había pedido a Izquierda Unida una parálisis legislativa inaceptable y que rompe porque no se la hemos dado. Porque los acuerdos hay que cumplirlos. Porque la tramitación de las leyes de izquierda están en curso en su fase final y ahora las aborta porque tiene miedo a enfadar a los poderosos. Ahora se explican las fotos con los Botín, padre e hija, con los Alierta y otros potentados. A la mayoría social, a los desempleados, a los trabajadores, el olvido como propuesta.
Izquierda Unida va a poner en primera fila las leyes que quedan sin finalizar en su propuesta programática para el próximo 22 de marzo. Una campaña electoral para la que La Fuerza de la Izquierda está preparada. Y lo va a demostrar movilizando, como todos y cada uno de los 28 de febrero reivindicando la fuerza de la gente y la fuerza del cambio. Maíllo anunció, como ocurrió en Grecia el domingo, la congelación de la sonrisa de los poderosos. El avance de la Fuerza de la Izquierda será posible con la movilización y con la lucha en la calle.
