Estimado paisano:
Le escribo esta carta para hacerle ver que el horario de los plenos en nuestro Ayuntamiento no es el más adecuado, ya que al mediodía de un día laboral puede darse el caso de que algunos de los representantes de nuestros vecinos, que tienen la suerte de tener empleo (pues no son políticos profesionales ni cobran por ello, como usted), no puedan asistir, lo que impediría que desarrollen su labor en la política local.
Comprendiendo que su lista es la más votada por los noriegos (y por gente de fuera), usted es el alcalde de todos. Por lo tanto, todos los ciudadanos tienen que estar representados en los plenos, tanto los que apoyan su gestión, como los que la critican, si llega el caso.
Puede comprender que en las fechas que estamos el horario más adecuado sería a última hora de la tarde y primera de la noche. Así, los noriegos que desearan asistir de público lo harían sin el sofocante calor del mediodía y a una hora que la mayoría de la gente la dedica al ocio.
Si el pleno se hace a un horario adecuado al público en general, hacemos un ejercicio de transparencia, debatiendo y gobernando de cara al pueblo. Porque transparencia no es limpiar unas gafas (quitar de la vista lo que molesta), es contar con la gente para decidir qué es mejor para el pueblo y sus vecinos.
Sin más, reciba un cordial saludo.
